3RO 4TO ACTIVIDAD 8 EXPERIENCIA 3 DPCC APRENDO EN CASA TERCERO CUARTO DE SECUNDARIA DESARROLLO PERSONAL CIUDADANÍA Y CÍVICA TAREA RETO WEB APRENDIZAJE PDF
EXPERIENCIA DE APRENDIZAJE INTEGRADA 3 | 3.er y 4.° grado
ACTIVIDAD 8
AUTORREGULAMOS NUESTRAS EMOCIONES PARA CONTRIBUIR AL BIENESTAR EMOCIONAL
¡Hola!
En la actividad anterior, explicamos cómo ciertas decisiones y acciones de los actores sociales deterioran la calidad del aire.
Según algunos estudios, esta contaminación también causa problemas en el estado emocional de las personas.
En esta actividad, reconoceremos nuestras emociones y aprenderemos a regularlas.
- CLICK AQUÍ Ver ACTIVIDAD 8 PDF
- Ver ACTIVIDAD 13 EXPERIENCIA 3 DPCC
- Ver ACTIVIDAD 8 MODELO RESUELTO DPCC
- Ver ACTIVIDAD 3 DPCC EXPERIENCIA 9
- Ver ACTIVIDAD 5 DPCC EXPERIENCIA 9
- Ver ACTIVIDAD 12 DPCC EXPERIENCIA 9
- Ver ACTIVIDAD 7 DPCC EXPERIENCIA 8
- Ver ACTIVIDAD 13 DPCC EXPERIENCIA 8
- Ver ACTIVIDAD 3 DPCC EXPERIENCIA 7
- Ver ACTIVIDAD 10 DPCC EXPERIENCIA 7
- Ver ACTIVIDAD 8 DPCC EXPERIENCIA 6
- Ver ACTIVIDAD 9 DPCC EXPERIENCIA 6
- Ver ACTIVIDAD 3 DPCC EXPERIENCIA 5
- Ver ACTIVIDAD 10 DPCC EXPERIENCIA 5
- Ver ACTIVIDAD 11 DPCC EXPERIENCIA 5
- Ver ACTIVIDAD 12 DPCC EXPERIENCIA 5
- Ver ACTIVIDAD 2 DPCC EXPERIENCIA 4
- Ver ACTIVIDAD 4 DPCC EXPERIENCIA 4
- Ver ACTIVIDAD 10 DPCC EXPERIENCIA 4
- Ver ACTIVIDAD 11 DPCC EXPERIENCIA 4
- Ver GUION SEMANA 7 WORD RADIO
- Ver LAS OTRAS ACTIVIDADES
Esto nos servirá para mejorar nuestra autoestima y proponer acciones cotidianas que contribuyan al bienestar emocional. Investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT)
han descubierto que la contaminación del aire en las ciudades urbanas de China influye en los estados de ánimo de las personas (tienden a decaer cuando la contaminación del aire empeora).
La investigación señala, también, que en los días más contaminados disminuye el índice de felicidad en la población.
Situaciones como las descritas nos llevan a pensar en la importancia de reconocer y autorregular nuestras emociones.
¡Comencemos!
Para conocer sobre nuestras emociones, leemos los textos “¿Qué son las emociones y cómo las reconocemos?” y “Emociones positivas y negativas”, que se encuentran en la sección “Recursos para mi aprendizaje”. Luego, desarrollamos lo siguiente:
• Elaboramos una relación de nuestras emociones. Las clasificamos en positivas y negativas, y las organizamos en un cuadro.
• Respondemos:
- ¿De qué formas expresamos nuestras emociones? Mencionamos un ejemplo por cada una de las formas (fisiológicas, faciales universales y lenguaje corporal). - ¿De qué manera un ambiente contaminado puede afectar nuestras emociones? Registra en tu cuaderno de trabajo.
TOMEMOS EN CUENTA QUE…
Para aprender a regular nuestras emociones, es importante identificar qué nos ocurre cuando, ante ciertas situaciones, sentimos que las emociones nos desbordan. Ahora, pensemos en una situación en la cual hayamos sentido que las emociones nos desbordaron y no las pudimos controlar.
Describámoslas teniendo en cuenta la situación en la que se presentaron, cómo se manifestaron, las personas involucradas y las consecuencias que originaron. Registra en tu cuaderno de trabajo.
Reflexionamos sobre la situación descrita y completamos el siguiente cuadro:
PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR RESPUESTAS
¿Cuáles fueron las emociones que sentimos que se desbordaron? Mencionamos las formas de expresión que permiten identificarlas. ¿Qué fue lo que originó las reacciones emocionales desbordadas?
¿Qué pasó por nuestra mente al sentir nuestras emociones desbordadas? Recordando cómo nos sentimos en ese momento, ¿qué pudimos haber hecho para resolver la situación de manera satisfactoria? Existen algunas actitudes que podemos desarrollar para controlar nuestras emociones. ¿Alguna vez alguien te ha dicho que eres empática/o o que te falta ser asertiva/o? A continuación, leemos los textos “Empatía y asertividad” y “El caso de Julián”, que se encuentran en la sección “Recursos para mi aprendizaje”. Durante el proceso de lectura del segundo texto, identificamos las actitudes y emociones de los personajes. Luego, realizamos lo siguiente:
• Elaboramos un diálogo asertivo para que Julián y Mario resuelvan el problema. Proponemos las palabras que cada uno podría emplear.
• Respondemos: ¿Cómo Julián podría demostrar empatía frente a lo sucedido con Mario? ¿Cómo se expresa la empatía en nosotras/os?
• Explicamos cómo la empatía y la asertividad contribuyen a controlar nuestras emociones.
• Elaboramos un diálogo donde se brinde un mensaje a una/un adolescente que vive en ambientes altamente contaminados.
Registra en tu cuaderno de trabajo.
TOMEMOS EN CUENTA QUE… Identificar nuestras emociones y aprender a controlarlas mediante actitudes como la asertividad y la empatía contribuye a nuestro buen estado emocional y fortalece nuestra autoestima. Ahora, para comprender qué implica la autoestima, leemos los textos “La autoestima y sus componentes” y “¿Qué hacer para fortalecer nuestra autoestima?”, que se encuentran en la sección “Recursos para mi aprendizaje”. Durante la lectura, identificamos las ideas principales respecto al concepto de autoestima y las características de sus componentes.
Luego, utilizamos esa información para completar el siguiente cuadro respecto a los elementos de la autoestima aplicados en nosotras/os.
AUTOCONCEPTO
AUTOACEPTACIÓN
AUTORRESPETO
¿Qué opinión tenemos sobre nosotras/os?
¿Qué aspectos nos gustan de nosotras/os? ¿
Cuáles nos disgustan?, ¿los aceptamos?, ¿por qué? ¿Cuáles son nuestras necesidades y nuestros anhelos?
¿Qué decisiones tomaremos para atenderlos?
Hasta aquí, hemos identificado nuestras emociones y reflexionado sobre situaciones en las cuales sentimos que se desbordaron.
Asimismo, conocimos cómo practicando la asertividad y la empatía podemos controlarlas, y comprendimos cómo regular nuestras emociones contribuye a fortalecer la autoestima. Para finalizar, elaboramos un texto en el cual explicamos la importancia de reconocer y controlar nuestras emociones para fortalecer la autoestima.
Registra en tu cuaderno de trabajo
EVALUAMOS NUESTROS AVANCES
Es el momento de autoevaluarnos a partir de nuestros avances, logros y dificultades.
Competencia: Construye su identidad.
CRITERIOS DE EVALUACIÓN
LO LOGRÉ
ESTOY EN PROCESO DE LOGRARLO
¿QUÉ PUEDO HACER PARA MEJORAR MIS APRENDIZAJES?
Expliqué mis características personales y potencialidades para afrontar situaciones de riesgo. Identifiqué mis emociones y las autorregulé para establecer relaciones de asertividad y empatía. Sustenté y argumenté una posición ante un dilema aplicando principios éticos. Propuse acciones cotidianas con el fin de contribuir a la mejora de la autoestima y la autorregulación de las emociones, para lograr el bienestar emocional.
VAMOS A LA SIGUIENTE ACTIVIDAD...
Hoy comprendimos la importancia de reconocer y regular nuestras emociones para nuestro bienestar emocional. En la próxima actividad, practicaremos algunas actividades físicas que contribuyen a mejorar nuestra salud.
¡Hasta pronto!
QUE SON LAS EMOCIONES Y COMO LAS RECONOCEMOS?
Las emociones son estados afectivos que se presentan como reacción ante una situación específica que las estimula. Las emociones se caracterizan por ser…
Breves Podemos reconocer las emociones porque... Se expresan a través de reacciones fisiológicas, tales como sudoración, resequedad en la boca, aceleración del ritmo cardiaco o respiratorio, entre otras. Se evidencian mediante expresiones faciales universales, como la sonrisa, el llanto, el grito, además de otras características del lenguaje corporal: extender los brazos arriba, replegarse, levantar la barbilla, etc. Ante una misma emoción, pueden existir diferentes formas de actuar; es decir, dos personas distintas pueden sentir alegría o cólera, pero demostrarlo de diferente manera.
La forma en que reaccionen dependerá de muchos factores, entre los cuales están la experiencia y el aprendizaje. A veces, desde pequeñas/os, nos condicionan a mostrar ciertas emociones y a contener otras, por nuestra condición de ser mujer u hombre, lo cual no favorece nuestro desarrollo emocional.
MANEJANDO EMOCIONES A NUESTRO FAVOR: RECONOCE TUS EMOCIONES
El primer paso para manejar nuestras emociones es reconocerlas e identificar de qué manera se presentan en nosotras/os. Esto nos permitirá aspirar a cumplir el segundo: aprender a manejarlas, lo cual se vincula con la autorregulación emocional. Regular las emociones no es lo mismo que reprimirlas.
La represión no es saludable, pues puede causarnos daño a nosotras/os mismas/os o a quienes nos rodean. Lo que debemos procurar es dedicar un tiempo a reflexionar sobre nuestras propias emociones, observar la situación en perspectiva y tratar de construir espacios más saludables para evitar caer en el descontrol.
EMOCIONES POSITIVAS Y NEGATIVAS
En la actualidad, las emociones positivas y negativas se consideran diferentes por las consecuencias que tienen para las personas. Pero, en el ser humano, pueden convivir al mismo tiempo los dos tipos, sin necesidad de que la presencia de unas implique la ausencia de otras. Tanto las emociones positivas (alegría, amor, armonía, entusiasmo, cariño, sorpresa, esperanza, etc.) como las negativas (miedo, tristeza, ira, nerviosismo, frustración, etc.) son necesarias e importantes para una persona. Una emoción negativa nos alerta de un posible peligro y nos empuja a actuar de forma urgente para solucionar dicho peligro; a la vez, reduce las opciones de respuesta. Mientras que las emociones positivas dan seguridad y permiten generar y ampliar los recursos o las opciones de respuesta, modificando las formas de pensar y actuar; además, nos ayudan a estar más abiertas/os y a tener curiosidad por explorar el mundo.
EMPATÍA Y ASERTIVIDAD
LA EMPATÍA COMO HABILIDAD SOCIAL: DISPOSICIÓN PARA EL DIÁLOGO (…)
Por ello, la empatía es un recurso fundamental para romper con ciclos de resentimiento y posibles desbordes emocionales. La empatía es mucho más que una habilidad: es una predisposición actitudinal que debemos practicar para poder tomar perspectiva cuando ciertas emociones empiezan a nublar nuestro juicio. La empatía, en ese sentido, es un sentimiento complejo y de múltiples dimensiones. Por una parte, presenta una dimensión emocional o instintiva, vinculada a la compasión, la preocupación o la indignación; y, por otra, una cognitiva: forzarse a ponerse en el lugar del otro, observar la situación desde distintas perspectivas, aunque predomine, por ejemplo, un sentimiento de odio y rencor. La empatía, en cualquier caso, implica un esfuerzo por suspender, aunque fuera por un momento, aquello que nos mantiene ensimismadas/os, encerradas/os en nosotras/ os mismas/os. Sea por reacción espontánea o por esfuerzo racional, la empatía es un mecanismo, una capacidad, un sentimiento que nos impulsa a pensar que nosotras/os no somos ni seremos dueñas/os de la verdad, ni siquiera de los sentimientos que creemos que nos pertenecen. (…)
LA ASERTIVIDAD COMO HABILIDAD SOCIAL: INICIATIVA PARA EL DIÁLOGO
Una de las habilidades sociales a la que podemos recurrir para expresar nuestras emociones y sentimientos es la asertividad o la comunicación asertiva.
Esta nos permitirá expresar lo que realmente queremos sin la presión del grupo, y con ello ayuda a fortalecer las relaciones con otras personas y a prevenir situaciones de violencia. La comunicación asertiva es mucho más que solo mostrar disposición a dialogar: es comprometerse con una situación reconociendo distintos factores que podrían afectar la comprensión de lo que uno quiere decir y hacer. (…) Por ello, la comunicación asertiva es una habilidad compleja que no se logra tan fácilmente. Implica reconocer causas, pensar en consecuencias y tener el valor de abrir nuestros sentimientos frente a otro. Reconocer la necesidad de ser asertivos y progresar poco a poco en ese sentido es una gran medida para restaurar nuestras relaciones interpersonales.
¿QUÉ ES LA AUTOESTIMA?
Es la percepción que tenemos de nosotras y nosotros mismas/os. Tiene que ver con los pensamientos y sentimientos de aceptación, valoración y aprecio.
Abarca desde el aspecto físico hasta nuestro mundo interior, incluyendo nuestras emociones, actitudes, habilidades y capacidades. Se trata de la autovaloración que se forma a lo largo de la vida y en la que influyen nuestras experiencias y relaciones con otras personas. Afortunadamente, para todas y todos es posible mejorar y fortalecer nuestra autoestima.
Está en nuestras manos comprometernos a asumir actitudes para lograr una autoestima alta. De lo contrario, se perjudicará el desarrollo integral de nuestra vida.
¿CUÁLES SON LOS COMPONENTES DE LA AUTOESTIMA? La autoestima se forma con base en los siguientes elementos:
a. el autoconcepto.
Se refiere a la opinión que tenemos sobre nosotras/os mismas/os. Es la representación de nuestra imagen frente a otras personas.
b. LA AUTOACEPTACIÓN. Es la capacidad de aceptarnos tal y La autoestima alta o positiva expresa sentimientos de satisfacción con nuestra forma de ser, hacer o sentir, y no permite que el desánimo nos afecte. La media o relativa indica cierta inseguridad en la autopercepción.
La baja o negativa se manifiesta a través de la inseguridad y la admisión de la idea de que somos incapaces de lograr los objetivos que anhelamos. como somos, con nuestras fortalezas y debilidades. Por ejemplo, cuando reconocemos nuestras cualidades y somos capaces de señalarlas, incluso las que nos disgustan o consideramos débiles.
c. EL AUTORRESPETO. Es el reconocimiento de nuestra propia individualidad, de nuestras decisiones, necesidades y motivaciones más íntimas. Por ejemplo, cuando deseamos superar algún aspecto de nuestra vida y mostramos convicción en aquello que pensamos y deseamos.
QUÉ HACER PARA FORTALECER NUESTRA AUTOESTIMA?
La autoestima puede fortalecerse cuando nos ejercitamos, constantemente, en reconocer quiénes somos y qué queremos, pero, sobre todo, en sentir satisfacción por desarrollar nuestro potencial, nuestro talento, y también aquello que nos desafía.
El tener debilidades o aspectos por mejorar no significa que no seamos valiosas/ os.
¡Al contrario!
Es más bien una oportunidad para crecer y complementarnos con otras personas.
El reconocimiento de nuestra necesidad de ellas y aportar a sus vidas hace que nos sintamos personas valiosas.
Fortalecer nuestra autoestima implica, entonces, reconocer y comprender nuestras cualidades para valorarnos como personas diferentes y únicas frente al resto. Algunas pueden gustarnos y otras no; pueden ser logradas o poco logradas. La capacidad de mejorarlas nos hace especialmente únicas/os y valiosas/os.